El proceso de Víctor Rivero se cae a pedazos al mando de Iquique
La derrota ante Rangers como local desató la furia de los hinchas iquiqueños que pierden la paciencia con la pobre campaña de Víctor Rivero al mando de Deportes Iquique.
El 0 a 2 ante Rangers fue una estocada para el plantel y los hinchas, quiebre entre la relación de los simpatizantes y el equipo.
Sobre el final del partido, gran parte del estadio empezó a cantar por la salida de Víctor Rivero, “Oh, Rivero ya se va”, señal inequívoca de que perdieron la paciencia con el estratega que está al mando del equipo.
Las expectativas eran altas, pero un 37% de rendimiento nadie lo esperaba, Iquique tiene 10 puntos y matemáticamente está a 1 punto de la liguilla. Sin embargo, en juego, pareciera estar a 15 o 20 puntos de luchar por algo.
La brújula de Rivero pareciera completamente extraviada, el equipo nunca ha mostrado un estilo de juego, no tiene fondo físico, futbolístico, ni táctico, menos reacción en momentos difíciles. La fortaleza mental de este equipo no existe y hasta los referentes del equipo se muestran golpeados en el campo de juego.
Las próximas horas serán claves para un golpe de timón en el banco para enmendar el rumbo, con Rivero o sin Rivero.